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Largas cartas de amor

Subir es la estrategia si es preciso por la parte áspera he revisado mil veces mis bolsillos no encuentro la manera no sé cómo se hace he espiado por el ojo de la cerradura puede que no sepa buscar debo pensar en eso no estoy seguro creo que mi corazón está muerto tal vez primero  muera el corazón después van las flores pero antes que rompa la ola y se descamen las estrellas debería intentarlo una vez más por la parte áspera o como sea las piedras me lo dirán como en esas largas cartas de amor

Portales

Donde el sol celebre los días fugaces estoy yo de pie considerando decisiones para volver definitivamente porque me he quedado en la última razón que me justificaba y aunque sea cierto que ya he pasado por aquí también lo es como un cristal antiguo que he cruzado este portal tantas veces que ya lo reclamo como mío sin embargo no le pertenece a nadie algunas veces está ahí solo hay que encontrarlo como la moneda que no buscabas y que de pronto un día aparece de la nada sin que puedas acertar de dónde ha salido quizá nadie pueda saberlo porque el camino de lo que se pierde es la ausencia de caminos

El día que el perro salió a la vereda

Al amanecer ya estaba todo hecho ni un solo ruido con la excepción de la música de la heladera y el tic tac del reloj que no sabía que el tiempo ya no se cronometraba dejó de ver por la ventana lo poco que pudo ver durante la noche de la ciudad desierta con la excepción de la luna que a ratos flotaba entre los altos edificios y del semáforo de la esquina que insistía con el cambio de luces y como el perro sabía abrir la puerta porque se lo habían enseñado abrió la puerta y luego empezó a bajar por la escalera veinte pisos que no contó porque no sabía contar con la excepción de las veces que le daban de comer al día tres como las luces del semáforo allí había unos monos intentando atrapar la luz roja el perro se sentó en la vereda para ver el espectáculo todo estaba diferente ese día al fin había vuelto a girar la rueda era lo que habían estado esperando los venados que ahora cruzaban la calle tranquilamente el pavo real que se pavoneaba una familia...

Promesas

Te prometo el espacio que quede entre los dos el día que me ausente que ya no me menciones en tus comentarios y olvides que fui yo quien una vez te enseñó que había un sitio fértil  para plantar nuestros sueños .... hoy sigo pensando que si uno está seguro de lo que promete eso no es una promesa una promesa conlleva el peligro de perder es un salto al vacío que se da con la esperanza de que el aire amortigüe la caída deberías pensar seriamente en no prometer nunca si no estás seguro de poder cumplir con tu palabra claro que entonces serías otro cobarde un cobarde más en la larga lista cuando la vida exige que tomes  riesgos hay que estar dispuesto a estrellarse contra los adoquines de la cordura

El dilema de las mariposas

Por qué no probar querernos una vez en nuestras mentes suspicaces hay una gran tormenta que se lo lleva todo y en su enorme ombligo tontamente nos encerramos vos y yo como mariposas aterradas por la oscuridad porque no sabemos qué cosas tendríamos que enfrentar si fuéramos capaces pero qué vamos a hacer con esto que nos pasa solo nos queda una vida

Los pasos

El trampolín más alto de la flor al vacío de la emoción al barro con la mejor estrategia para no fallar y atada a mi muñeca para no perderme las voces del viento ellas susurran dentro de mí y lo que dicen lo que dicen estas voces es verdad dicen lo que soy un eco fallido un nudo en la garganta cierta clase de humo gris que se hace invisible para quedarse con las hojas mojadas de rocío y lo que busco lo que busco es lo que tengo no encuentro nada más todo lo que atesoro lo seguiré siendo una y otra vez una y otra cada día todos como los pasos