Buitres en la encrucijada

 Amarga la correa que sujeta 
después de un día de camino
la tarde
infinitamente calva 
se arrastra en el desierto
con buitres por todas partes 

el cazador sin prisa  
acomoda su escopeta 
vencido por el cansancio
tan sentado como estaba
abre grande la boca
para comerse una bala

pasajero en soledad 
a bordo de un tren sin rumbo
no quería vivir
por no matar a quien ama
lo peor llegará pronto
porque las cosas que quedan atrás
eran del todo malas
 
pero a la hora del recuento
perdido en el salar
un sentimiento  perdido
se interpone a última hora
que lo hace conceder
quizá no todo está perdido
para volver a empezar

pero ya es tarde para dar la vuelta
sellada está tu espera
no hay camino de retorno
en tan macabra encrucijada
aunque no haya disparo
los buitres de él
se encargan