Los encuentros asoman sus pies por debajo de la sábana con el pálido sol y el rocío que moja los claros busca donde se buscan los caminos y ahí estaba aún la luna discontinua perdida de tanto ambular pero al parecer algo le faltaba lo tenía yo me quedé atento a su aparente preocupación así somos los ladrones ahora todo aquello que me rodeaba la primavera en su conjunto era mío no son solo palabras un torrente de pañuelos al aire así se atrapa a los incautos ella era la luna y dejó que la robara