Llegué a creer
que confundía aquellos gritos
con chillidos de gaviotas
que estuvieran peleando por la comida
sin embargo no eran gaviotas lo que se escuchaba
claramente se trataba de otra cosa
eran personas como yo
que gemían o gritaban
algunos hasta con tonos de desesperación
o que lloraban
tan angustiados
también como lo estaba yo
pero había mucho sin encajar
por ejemplo las distorsiones del aire
como si las cosas no sintonizaran bien
era algo que me hacían dudar de todo
me puse a caminar por la grava ruidosa de la orilla
noté que el mar crecía muy rápido allí
demasiado rápido
con una rapidez fuera de lo normal
amontonaba resaca en abundancia
y algo se movía en medio de aquellos restos
no podía precisar de qué se trataba
porque había niebla
una niebla gomosa tan pesada
que no dejaría pasar la luz del sol
cuando amaneciera
en caso de que ya no lo hubiera hecho
Comentarios
Publicar un comentario