En la arena sin límite

rodeado de viento
buscaba refugio
los truenos sacudían el aire
haciéndome temblar
y algo me seguía
como un perro fiel que no olvida su propósito
siempre detrás
con su cansancio y su extravío
trepábamos juntos lo alto del círculo
o descendíamos por la cuesta
hasta el oscuro fondo
en busca tal vez de un fuego
que me calentara
o del beso que me despertase
de esta peligrosa situación de riesgo
Comentarios
Publicar un comentario